Líderes
Hay algunos días en los que todo ha de salir a la perfección y ayer fue uno de ellos.
Primeramente, por la mañana fui a recoger el tercer premio en el torneo de Warhammer que jugué la semana pasada. Por problemas con la tinta de la impresora no pude tener aún el diploma que acredita mis victorias, pero pronto estará en mi poder. Aún así no fue un viaje en vano pues estuve hablando con un chaval que hace tiempo que tenía a la venta un mega ejército de Skaven realmente baratísimo. A grandes rasgos eran tres unidades de guerreros, una de alimañas y otra de monjes de la plaga, varios personajes y varias unidades más. Están montados algunos y prácticamente todos sin imprimar ni pintar.
Cuando llegué a casa empezé a echar cuentas y el ahorro es muy grande por lo que de tarde le llamé y le dije que pusiese sobre las miniaturas el cartel de "vendido". El proximo fin de semana serán mios por fin y ya tendré de esta manera tres ejercitos de Warhammer: los Orcos completamente terminados y pintados, los Enanos en cajas aún 
y estos Skaven con los que ya podré jugar tranquilamente a 2000 puntos. A ello se han de sumar todos los ejércitos históricos, lo que convierte a mi lista de miniaturas para pintar en enorme. Seguramente me ponga poco a poco con los Skavens, de diez en diez, porque son relativamente sencillos: imprimación negra, pincel seco marrón para el pelaje, pincel seco color carne para las zonas sin pelo y plata para las partes metálicas. Y los detalles van a ser pocos en las unidades de infantería. Para los personajes me esmeraré más pero esos serán al final y/o en vacaciones.
Después de comer, por la tarde, tenía partida de ajedrez. Ésta era una de las jornadas clave. Éramos líderes de la categoría empatados a puntos con la Universidad de Oviedo C, ambos invictos en la tercera ronda. Fue un encuentro intenso: pronto terminó el cuarto tablero con victoria para ellos, por lo que empezabamos perdiendo 0-1; tras dos horas más de juego termina la mesa uno con victoria de nuestro jefe de equipo, empates. Ya rozando las tres horas y media termina la mesa tres con victoria nuestra, de momento ganábamos 2-1 con lo que el empate estaba asegurado.
Únicamente yo seguía jugando, una partida muy interesante en la que empezé perdiendo, con muy poco espacio para las maniobras de mis piezas y resistiendo un ataque por el flanco de rey. Me obligan sus peones a cerrarme en las tres últimas filas pero en contrapartida abro dos columnas por las que mis torres pueden jugar. En el momento en que mi rival debía seguir presionando con sus peones hasta lograr abrir líneas en mi enroque y atacar por ellas, intercala la torre en la banda, delante de sus peones y sin casillas de juego pues entre mi alfil y un peón suyo carecía de juego con esa torre. Así pues, en la práctica yo tenía una pieza de más, dos torres y alfil contra una torre y un alfil. Entro con mis torres en septime y octava dando jaques e incluso amenazando y capturando peones. Mis piezas ya estan activas y algo superiores y evito con cierta facilidad su posible contrajuego. Estoy, creo yo, con una ligera ventaja pero tengo un problema grave: me quedan sólo 10 minutos de las dos horas con las que empezé. Mi rival me ofrece tablas pero yo, que aún no conocía el resultado en la mesa tres las rechazo cuando el reloj marca 8 minutos y descontando, confiado estaba en mis posibilidades de lograr coronar a toda velocidad y ganar así la partida. Cinco jugadas después, ya sabiendo el resultado providional de encuentro, firmo tablas por repetición y ganamos así el encuentro por 2.5 - 1.5 puntos.
Ya somos, por lo tanto, líderes de la clasificación en la mitad de la temporada. Estos eran los rivales más fuertes que nos podían tocar y, una vez jugemos la siguiente ronda cada vez serán rivales más débiles. El ascenso, si bien aún no está decidido, lo tenemos más cerca.
Tras haber cenado y con la alegria del liderato nos ponemos rumbo a Oviedo. Era la primera vez que salíamos de fiesta por la capital del Principado y la verdad que ya estamos pensando en volver 
. No fue una noche memorable pues fuimos a conocer el entorno, pero las risas fueron muchas y los bares tienen muy buena pinta y buena música, además de la cantidad de gente que sale por allí. esta semana decidiremos si repetimos Oviedo o cambiamos a Gijón para conocer también esa ciudad. Ya veremos, lo que si parece seguro es que Avilés no será por donde salgamos el próximo fin de semana.
En resumen: ejército nuevo, tablas con remontada que nos convierten en líderes y fiesta por Oviedo. y todo en un mismo día. A ver si los dos últimos se repiten el próximo 
.
Un saludo.
2 comentarios
juanjus!!! -
Felix -