Comerciar con sal
Todos aquellos que juegan al Patrician III, un juego de Pc en el que has de hacerte rico y poderoso mediante el comercio y/o la piratería, habrán aprendido que la sal es un producto sin rentabilidad económica alguna. Tener fábricas de sal únicamente tiene una finalidad, poder producir otros materiales sin preocuparte por el suministro, pero resulta que no es así.
Estabamos hoy los futuros historiadores en una divertida charla (nótese la ironía) sobre "La ciudad romana en el noroeste de la Peninsula Iberica" impartida por un catedrático de Historia Antigua de la Complutense creo que era (lo cierto es que el tema era interesante pero un poquillo aburida la explicación, faltaban los medios audiovisuales que empleamos en clase 
) Pues bueno, una de las cosas que dijo es que la sal era un elemento político de primer orden, de hecho es verdad que el tenerla permitia conservar mejor los alimentos, lo cual a falta de supermercados es bastante importante.
Eso me condujo a mí a recordar las partidas al Patrician III, el hecho de crear lineas de comercio por todo el Mar Báltico, defendiendo los mares de los piratas, explorando el Mediterraneo, construyendo una bonita catedral, llegando a gobernador de la Liga Hanseatica... bueno, no, de hecho nunca llegue ni a ser alcalde 
Seguidamente me plantee que podría instalar el juego e intentar hacerme rico con el comercio de la sal, pero en vista de que quedan dos semanas para el primer examen y aún he de terminar un trabajo, sobre Roma precisamente, no creo k sea lo más aconsejable, jejeje.
Pues eso, recordad, en la sal está el futuro.
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Felix -